LA SAL DE LA TACITA DE PLATA

¿Se puede tener más arte que un gaditano carnavalero? incluso para un sevillano malage como yo, reacio a reconocer a cualquier otro pueblo con más salero, la evidencia se hace tan palmaria, obvia, que sería patético no reconocerlo.

De chaval despreciaba a esos "payasos" encima de un escenario haciendo mamarrachadas, despreciaba a sus seguidores y me decía para mí mismo que perdían el tiempo. Todo porque nunca me molesté en escucharlos. Desde el mismo momento en que me tomé la molestia de abrir bien las orejas, quedé prendado de su arte.

No soy un experto en carnavales ni mucho menos, un "jartible" que llaman ellos. Comparado a mi parienta, soy un aprendiz. Pero algo sé. Hace más de diez años ví en Bormujos a "Una chirigota con clase", del Love y Cabra, y empezó a picarme el gusanillo. Desde entonces, poco a poco, la droga de Cai ha ido entrando en mis venas hasta apoderarse de mí por completo. Cada año los escucho más y mejor, voy conociendo más acerca de los autores, letristas, y por supuesto, de los chirigoteros, mis favoritos. Voy descontando los días que quedan para el siguiente carnaval, me aprendo los estribillos más coreados cada año, en agosto puedo estar escuchando un cuplecito de hace diez años y mi admiración por estos monstruos del arte crece y crece sin parar.

Creo que mis favoritos son el Love y el Cabra, los líderes de una chirigota que desde hace muchos años me llegan hasta lo más hondo, no sólo por su gracia infinita, sino por sus cuplés sentidos, llenos de recuerdos, emociones, libertad, amor, etc..auténticos poetas que saben juntar palabras para hacernos reir y ...llorar. Sus chirigotas han sido antológicas:"Los primeros de la clase", un grupo de niños traviesos detrás de los pupitres, "Los pofesionales" con el boquete hecho, "Ojú ya saltó el levante" y su locura tarifeña, "No somos nadie" (mi favorita) recordándonos la fugacidad de la vida y el carnaval en el cielo, "Más pallá que pacá" y sus viejecitos parkinsonianos con una vida de carnaval a sus espaldas.Hablo de memoria, sin mirar You Tube, y seguro que se me olvida algo.

Pero hay más, muchos más y muy buenos: el gran Yuyu ("Los que vinieron de Leningrado porque no era de su agrado" el nombre ya merece un premio donde un oficial del ejército ruso emigrado a Cai se sentía muy de allí porque se levantaba a la una y cuarto, "Los últimos en enterarse" desde ahí se ganó el título de cabrón, "Los arapahoe que joe" con los caballos con las bujías estropeadas, "Los yesterdays" jipis que no pisaban la hierba sino la fumaban, etc.) el Selu (cuya presentación de "Los que valen valen" es la mejor de la historia, "Las marujas" mejor interpretadas que las marujas verdaderas, "Lo que diga mi mujer" acojonaos por sus parientas, "Los enteraos" que llevan 30 años en todo y saben de todo, "Los borrachos" y sus duros antiguos al revés), el simpático Manolito Santander y el himno extraoficial del Cádiz, el Canijo de Carmona con sus 250 Kg, el Sheriff y los picoletos aguafiestas, y la nueva hornada viene pisando fuerte, como "Los que van por derecho", un grupo de jueces con su crítica demoledora a una chirigota llena de artistas y "Esto conmigo no pasaba", la mejor parodia a un dictador desde Chaplin y "El gran dictador".

En las comparsas, coros y cuartetos me pierdo más; sé que hay grandes letristas, como J.C Aragón y el polémico Martínez Ares, que Juan Pardo y su coro casi siempre ganan, pero tengo que reconocer que no es lo mío.

Poco más se puede decir; disfrutar de un teatro en constante renovación con arte y, no nos olvidemos, la sabiduría de una Tacita de Plata con más de 3000 años de historia.

para mi carnavalera number 1